¿Cómo dar el masaje erótico que dejará sin palabras en 7 pasos?

¿Buscas una forma de aumentar la intimidad con tu pareja y explorar nuevas formas de placer?

1. Prepara el Entorno para el Placer
La atmósfera es fundamental. Enciende unas velas aromáticas, apaga las luces fuertes y pon música suave. Como destaca Charla Hathaway, autora del libro sobre masajes eróticos, “el ambiente debe inspirar confianza y comodidad”. La comunicación abierta es clave; pregunta a tu pareja cómo se siente y qué necesita antes de comenzar.

2. Despierta los Sentidos de Forma Suave
Antes de aplicar aceite, explora el cuerpo de tu pareja con movimientos ligeros. Puedes usar objetos como plumas o seda, o simplemente tus manos. Según Hathaway, comenzar con este tipo de estímulos sensoriales "despierta zonas del cuerpo que a menudo pasan desapercibidas".

3. Elige el Aceite Perfecto
El aceite de masaje es fundamental para una experiencia placentera. Hathaway recomienda opciones naturales como el aceite de coco o de almendra, que son suaves y no grasos. Si buscas algo innovador, considera aceites con CBD, que pueden ayudar a relajar los músculos y aumentar la sensibilidad.

4. Comienza con un Masaje Relajante
Empieza con movimientos amplios y suaves, enfocándote en zonas de acumulación de tensión como la espalda y los hombros. Susan Findlay, experta en masajes terapéuticos, sugiere que “un masaje relajante inicial prepara el cuerpo y la mente para recibir estímulos más íntimos”.

5. Crea la Tensión y la Expectativa
Aquí entra el arte del juego previo. Trabaja cerca de las zonas sensibles, pero sin tocarlas directamente. Según Hathaway, “esta fase aumenta la excitación al combinar el deseo con la anticipación”. Usa tus movimientos para explorar, pero sin apresurarte.

6. El Placer de las Zonas Erógenas
Cuando la tensión esté en su punto máximo, dirige tu atención a las zonas erógenas, como el cuello, la parte baja de la espalda y los muslos. Si tu pareja lo permite, puedes incluir penetración digital, estimulación directa del clítoris, o incluso sexo oral, según lo que ambos acuerden y deseen. Hathaway sugiere que la comunicación es esencial: "Escucha cómo responde el cuerpo de tu pareja".

7.Conecta en el Clímax
El masaje no termina con el orgasmo. Después del clímax, tómate un momento para abrazar a tu pareja y disfrutar juntos del momento. Esto fortalece la conexión emocional y hace que la experiencia sea aún más satisfactoria para ambos.

Un masaje erótico es mucho más que una experiencia física: es un acto de intimidad, atención plena y conexión. Practica estos pasos, adáptalos a las preferencias de tu pareja y convierte cada noche en una oportunidad para explorar y fortalecer vuestra relación.