¿Es el sexo real igual que en la pornografía?
La industria de la pornografía presenta cifras de consumo cada vez mayores y de la cual siempre ha existido un debate entre si esta afecta o tiene influencia en la vida personal, social y/o de pareja.
Los sexologos han realizado investigaciones en los cuales están los dos puntos en donde el porno no es tan perjudicial como se cree o que el porno si puede afectar la conducta sexual de las personas, principalmente a los jóvenes.
Sin embargo, en lo que coinciden los expertos es que la pornografía en términos generales no es negativa si se entiende de que cómo en el cine, las películas porno es una mezcla de realidad y ficción.
Ver pornografía no debe convertirse en un hábito o adicción
Esto implica riesgos al crearse falsas expectativas y ciertos estereotipos sobre la sexualidad que no son reales. En el caso de los jóvenes particularmente, que no reciben un educación sexual de calidad y acuden al porno para descubrir cosas sobre el sexo, basándose en un sexo completamente desvalorado y misógino que luego intentan recrear y es ahí dónde viene el problema. Podrían creer, por ejemplo, que en el sexo no hay espacio para el juego previo antes del coito y que el enfoque está solo en la penetración.
Para concluir un poco, siempre es importante reflexionar sobre el material que estamos consumiendo. En esta industria cada vez se suman más mujeres que están creando e inculcando una sexualidad consciente y realista, donde hay sexo puro y duro, sin posturas extremas, en el que hay exitaciones y orgasmos reales, con sus fluidos y todo, en el que también hay un respeto hacia el rol sexual de la mujer.
"El porno puede ser todo lo sucio, lascivo y excitante que queramos, pero no por ello tiene que ser degradante hacia la mujer"